dupont asturias

Planta de DuPont en Asturias

Industria química es un término que sirve para designar una factoría autónoma, generalmente designada con una denominación propia. (Ej: AZSA, NICAS, ect) que puede incluir o no la referencia a una corporación mayor a la que pertenezca, en la que esté integrada o de la que forme parte (Ej: Fertiberia, Inespal Aviles, Du Pont Asturias, Acelor Mittal, etc.)
 
Dentro del recinto de la propia industria o factoría puede haber plantas químicas relativamente diferenciadas o independientes, inclusive autónomas (Plantas de Nomex y Ftalato de Du Pont en Tamón, Plantas de Permanganato y pasta de electrodos de Industrial Química del Nalón en Trubia, etc.)
Las industrias químicas suelen ubicarse próximas entre sí, en parques, campos, polos o complejos, lo hacen por razón de disponibilidad de materias primas, comunicaciones, mercados, fuentes de energía, servicios o ventajas fiscales y legales o de otro tipo, así como por la posible interdependencia y sinergia de los respectivos procesos, ya que las industrias de cabecera suministran productos a las intermedias, y así sucesivamente (Ej: complejo químico Flix de Tarragona).  Junto a núcleos industriales de tradición e historia centenaria (Cuenca del Ruhr) se propicida la implantación coyuntural de núcleos industriales en zonas deprimidas o en reconversión, o se desarrolla en países del tercer mundo por razón de existencia de materias primas, bonificaciones, mano de obra barata o legislación medioambiental permisiva. (Explotaciones petroleras tropicales, planta de pesticidadas en la India, etc).
 

Una planta química es una instalación industrial donde se llevan a cabo procesos químicos a gran escala, con el propósito de producir productos químicos y materiales de uso industrial o comercial. Estas plantas pueden ser muy diversas en tamaño y complejidad, desde instalaciones de pequeña escala que producen productos químicos especializados hasta complejos industriales a gran escala que fabrican una amplia variedad de productos químicos básicos, intermedios y finales.

En una planta química, se pueden llevar a cabo una serie de operaciones y procesos, que incluyen:

1. Síntesis química: La creación de compuestos químicos a través de reacciones químicas, que pueden incluir la mezcla, la transformación y la purificación de materias primas para obtener productos químicos deseados.

2. Destilación y fraccionamiento: La separación de mezclas de sustancias químicas en componentes más puros mediante la evaporación y condensación de los diferentes componentes de acuerdo a sus puntos de ebullición.

3. Reacciones químicas en serie: Cuando se necesitan múltiples etapas de reacciones químicas para producir un producto químico final específico.

4. Almacenamiento y manipulación de productos químicos: Las plantas químicas deben contar con instalaciones adecuadas para el almacenamiento y la manipulación segura de productos químicos, así como sistemas de control para evitar accidentes y derrames.

5. Tratamiento de efluentes y gestión de residuos: El manejo responsable de residuos químicos y la protección del medio ambiente son fundamentales en las plantas químicas. Se deben seguir normativas y regulaciones estrictas para el tratamiento de efluentes y residuos.

6. Control de procesos: Las plantas químicas utilizan sistemas de control avanzados para supervisar y regular los procesos químicos, lo que permite garantizar la calidad y seguridad de los productos químicos.

Las plantas químicas pueden producir una amplia variedad de productos, que incluyen productos químicos básicos como ácidos, bases y sales, así como productos químicos especializados, plásticos, productos farmacéuticos, productos químicos para la construcción, productos petroquímicos y muchos otros. La seguridad y el cumplimiento de las regulaciones son de suma importancia en las plantas químicas debido a la naturaleza de los productos químicos y los riesgos asociados. La gestión ambiental y la seguridad son áreas críticas de atención en estas instalaciones.